Las calderas de condensación son las únicas cuya fabricación se permite hoy en día en Europa; lo que es, de por sí, ya un claro y favorable indicio de sus ventajas. Si estás valorando instalar una caldera Vaillant de condensación es conveniente que, antes de decantarte por ello, anticipes las repercusiones que tendrá la decisión que acabes adoptando. Para ello, puedes tomar en consideración las siguientes ventajas e inconvenientes:

Las principales ventajas que ofrecen son la de su superior eficiencia energética, que radica en la posibilidad de valerse del calor derivado de la condensación de agua, y la de permitir un mayor ahorro, llegando a alcanzar este cifras de hasta un 33 % sobre el consumo de una caldera convencional. Como consecuencia de todo ello, el impacto ambiental de instalar una caldera Vaillant de condensación es mucho menor que el de las otras opciones; algo que, en nuestros días, debe ser particularmente valorado.

Otra de las ventajas del funcionamiento de esta caldera, especialmente apreciable en los viviendas pequeñas, se halla en la generación de ruido de menor intensidad que el de las calderas convencionales.

Pese a la rotundidad de las ventajas, existen algunos inconvenientes de muy pequeña entidad. Principalmente su mayor coste, que no debería ser un gran problema toda vez que, gracias al mayor ahorro permitido, la inversión podrá recuperarse en cuestión de meses, y la necesidad de instalación de desagüe para la canalización de los condensados al exterior.

En conclusión, las ventajas de la instalación de una caldera de condensación superan con creces los pequeños inconvenientes de esta opción; inconvenientes que acaban traduciéndose en un incremento del coste que pronto será recuperado por el usuario al verse este favorecido por un ahorro más que notable en su gasto periódico.

En Instalaciones Hermanos Munuera somos líderes en instalación de calderas Vaillant.